Si estos días te
vas de shopping resulta prácticamente imposible no toparte con alguna promoción
o publicidad con motivo de San Valentín. Pero claro, no todo el mundo tiene
pareja y es normal que estos acaben hasta el moño de la festividad. La verdad
es que no les quito razón, por eso yo soy de las que pienso que de vez en
cuando nos tenemos que dar un capricho nosotros mismos, sin tener que esperar a
fechas señaladas, ni a que nos regalen, simplemente porque sí, porque nosotros
lo valemos. En mi caso, me encanta darme pequeños caprichos en forma de joyas,
como estas que tengo fichadas y que tarde o temprano acabaré comprándome.
Mil gracias por vuestros comentarios y visitas
